Medicina Estética Facial
Categoría:
Hilos Tensores
Descripción:
Hilos tensores o de sustentación
Con el paso de los años, ocurren una serie de cambios fisiológicos, es decir, normales y esperados, que favorecen la aparición de la flacidez. Dentro de estos cambios encontramos:
La cantidad de colágeno y elastina que produce nuestro cuerpo disminuye. Este par de sustancias, junto con el acido hialurónico, son las encargadas de dar esa apariencia de firmeza y juventud a la piel, así como su elasticidad.
Los músculos de la expresión facial pierden su tono, la grasa pierde su posición, el hueso se reabsorbe, y los tejidos caen.
Estos cambios en la estructura del rostro dan la apariencia de cansancio y signos evidentes de envejecimiento, que se manifiestan como:
Caída de la cola de ceja
Aparición del surco nasoyugal
Pronunciamiento de los surcos nasogenianos
Líneas de “marioneta”
Perdida de la línea mandibular
Deterioro y caída de las estructuras del cuello
En general, lo que se observa, es una pérdida de la definición del óvalo facial. Los hilos tensores o de sustentación son utilizados para definir y mejorar el óvalo facial. Son bioabsorbibles. Se introducen en la piel por medio de agujas o micro cánulas, lo que disminuye el tiempo de recuperación y disminuye el riesgo de inflamación.
Una vez introducidos, los hilos traccionan y producen una tensión sobre el tejido, dando un resultado muy natural. El tratamiento es ambulatorio, se realiza con anestesia local. La recuperación suele ser rápida, 4 y 5 dias. Los resultados duran entre 12 y 24 meses, según las características de cada persona. Producen un cambio inmediato, sin embargo, el efecto máximo en cuanto a la producción de colageno se da aproximadamente a los 6 meses.
La aplicación de hilos se puede complementar con otros tratamientos o técnicas como láser, toxina botulínica, revitalización facial, peeling químico, rellenos faciales, entre otros. Lo importante de esta combinación, es que el profesional médico indique el orden correcto de los mismos.
Indicaciones
Ptosis (caída) de la cola de la ceja (foxy eyes)
Líneas perilabiales
Surcos nasogenianos incipientes
Líneas de marioneta incipientes
Pómulo y mejillas caídas
Atenuar papada incipiente
Cuello
Flacidez facial generalizada
Flacidez facial de leve a moderada, cuando las manifestaciones son estéticamente molestas, pero un ritidectomía o lifting quirúrgico produciría una sobre corrección, dejando un rostro artificial y rígido.
Pacientes que no desean cirugía convencional y están de acuerdo con los alcances de esta técnica.
Pacientes que tienen contraindicada la anestesia general, pero pueden usar anestesia local.
Pacientes con pérdida de peso importante.
Otras partes del cuerpo que manifiesten flacidez como abdomen, muslos, brazos con flacidez leve.
¿De qué material están hechos los hilos?
A través de la historia se han empleado diferentes materiales para hacer los hilos, así como técnicas o instrumentos para su aplicación. En la actualidad, se usan los de materiales reabsorbibles, que han demostrado ser los más seguros.
No reabsorbibles y permanentes: el material más usado es el polipropileno, oro, platino, aptos de prolipropileno.
Reabsorbibles y temporales:
Hilos de larga absorción: hilos tejidos de poliamida y poliuretano
Hilos absorbibles:
Poliláctico
Podioxanona
Coprolactina
Poliláctico con polidioxanona
Polidioxanona (PDO): material biocompatible, no produce alergias. Utilizado tradicionalmente como material de sutura. Es de los más utilizados para hilos de sustentación, dada su seguridad, biocompatibilidad y estimulo en la producción de colágeno.
Ventajas de los hilos de sustentación
Apariencia natural
Mínima cicatriz o sin ella
Mínimo daño tisular
Buen estimulo en la producción de colágeno y elastina
Procedimiento ambulatorio, no requiere internamiento
Anestesia local
Corto periodo de recuperación
Técnicas de aplicación
Varían según el hilo elegido, así como la cantidad a utilizar. En general, existen dos tendencias de aplicación, la oriental y la europea.
Tendencia oriental: muy conocida. Emplean múltiples hilos de PDO en mallas y redes. Su principal objetivo es estimular la producción de colágeno y lograr la redensificación del tejido. Ideal en pacientes con pieles delgadas.
Tendencia europea: utiliza una menor cantidad de hilos. Su principal objetivo es reposicionar los tejidos por medio de diseños de suspensión. Emplea hilos más gruesos, con espículas o conos, o algún medio de tracción.